Capricho estival by Javier Krahe Lyrics
Con sus libros, con sus juegos
Sus películas, sus vicios
Sus amores, sus apegos
Y sus ritos veraniegos
Que exigían sacrificios
Hasta las claras del día
Casi nunca se aburría
O tocaba la guitarra
Y escribía en el cuaderno
Y si aquí rimaba en “arra”
Escogía una con garra
Un acorde así, moderno
Y una dulce melodía
Y eso ya lo entretenía
Y aún más si le salía
Si salía era feliz
Para toda una semana
Retocando algún matiz
O cantándole a su hermana
Lo que ya llevara hecho
Que era un buen trecho
Si nadie le interrumpía
Porque muy, muy a menudo
Iba a verlo algún amigo
Y si aquí rimaba en “udo”
Se decía: cojonudo
¿qué hago ahora, lo maldigo
O le muestro mi alegría
Con un vaso de sangría?
Y los dos, vaso tras vaso
Vaciábanse una jarra
Y le daban un repaso
Al triunfo y al fracaso
Y, en su funda, la guitarra
Profundamente dormía
Exhibir esa manía
Como que lo cohibía
Luego, a solas otra vez
Retomaba el roto hilo
De su trama, una memez
Una cosa de este estilo
Y poníase al acecho
De un nuevo trecho
A su tarea volvía
Y, de pronto, su vecina
Con un grupo de arquitectos
Le medían la cocina
O, de pronto, su sobrina
La de párpados perfectos
De Tenerife venía
Y hasta luego, sinfonía
Pero, en fin, sacaba ratos
Para palabras y acordes
Y si aquí rimaba en “atos”
No decía: cuán ingratos
Cuán bullicosos, cuán bordes
O si sí, con ironía
Que él a todos recibía
Y con suma cortesía
Qué podía hacerle él
Si un amigo es un amigo
Su vecina, Maribel
Y su sobrina testigo
De que entraba por derecho
A un tercer trecho
Pues con él lo recorría
Aunque todo fuera adverso
Era el hombre muy paciente
Y, a la noche, estaba inmerso
En su trama y verso a verso
Avanzaba tercamente
Casi, casi la tenía
Pero el sueño lo vencía
En su almohada a la cosa
Daba una y otra vuelta
Y, si aquí rimaba en “osa”
Se decía: anda, la osa
Pero si ya está resuelta
Solamente faltaría
Repasar esta armonía
Y un remate y ya estaría
Y a las tantas, yo que sé
Levantábase del lecho
Daba sorbos a un café
Y, con este último trecho
A su capricho estival
Punto final
Justo cuando amanecía
Sus películas, sus vicios
Sus amores, sus apegos
Y sus ritos veraniegos
Que exigían sacrificios
Hasta las claras del día
Casi nunca se aburría
O tocaba la guitarra
Y escribía en el cuaderno
Y si aquí rimaba en “arra”
Escogía una con garra
Un acorde así, moderno
Y una dulce melodía
Y eso ya lo entretenía
Y aún más si le salía
Si salía era feliz
Para toda una semana
Retocando algún matiz
O cantándole a su hermana
Lo que ya llevara hecho
Que era un buen trecho
Si nadie le interrumpía
Porque muy, muy a menudo
Iba a verlo algún amigo
Y si aquí rimaba en “udo”
Se decía: cojonudo
¿qué hago ahora, lo maldigo
O le muestro mi alegría
Con un vaso de sangría?
Y los dos, vaso tras vaso
Vaciábanse una jarra
Y le daban un repaso
Al triunfo y al fracaso
Y, en su funda, la guitarra
Profundamente dormía
Exhibir esa manía
Como que lo cohibía
Luego, a solas otra vez
Retomaba el roto hilo
De su trama, una memez
Una cosa de este estilo
Y poníase al acecho
De un nuevo trecho
A su tarea volvía
Y, de pronto, su vecina
Con un grupo de arquitectos
Le medían la cocina
O, de pronto, su sobrina
La de párpados perfectos
De Tenerife venía
Y hasta luego, sinfonía
Pero, en fin, sacaba ratos
Para palabras y acordes
Y si aquí rimaba en “atos”
No decía: cuán ingratos
Cuán bullicosos, cuán bordes
O si sí, con ironía
Que él a todos recibía
Y con suma cortesía
Qué podía hacerle él
Si un amigo es un amigo
Su vecina, Maribel
Y su sobrina testigo
De que entraba por derecho
A un tercer trecho
Pues con él lo recorría
Aunque todo fuera adverso
Era el hombre muy paciente
Y, a la noche, estaba inmerso
En su trama y verso a verso
Avanzaba tercamente
Casi, casi la tenía
Pero el sueño lo vencía
En su almohada a la cosa
Daba una y otra vuelta
Y, si aquí rimaba en “osa”
Se decía: anda, la osa
Pero si ya está resuelta
Solamente faltaría
Repasar esta armonía
Y un remate y ya estaría
Y a las tantas, yo que sé
Levantábase del lecho
Daba sorbos a un café
Y, con este último trecho
A su capricho estival
Punto final
Justo cuando amanecía